Cuando el cáncer de páncreas llega a tu familia…
Hoy queremos ofreceros el testimonio directo de una familia de donantes de nuestro proyecto en precipita que perdió a un ser querido tras sufrir un cáncer de páncreas. Muchas gracias a estas personas por abrir su corazón y compartir su experiencia para que otra gente conozca un poco más sobre la convivencia con esta terrible enfermedad.
¡Hola! Somos dos familiares de un paciente con cáncer de páncreas. Un día como hoy hace 5 años se torcieron las cosas en nuestra familia. Todo empezó con unos dolores de tripa totalmente llevaderos y sin importancia, hasta que poco a poco fue aumentando su frecuencia y se dio con el diagnóstico del cáncer “gran olvidado”: cáncer de páncreas. ¿Cómo una persona tan sana, tanto física como mentalmente, podía tener una enfermedad tan grave con tan pocas posibilidades de curarse?
Una vez aceptamos la enfermedad, nuestro primer objetivo fue informarnos de todos los posibles tratamientos existentes para esta enfermedad. ¿Sabéis que existen ensayos clínicos que suponen una oportunidad para el paciente en cuanto al tratamiento del cáncer de páncreas y que en numerosas ocasiones son un beneficio clínico y mejoran la calidad de vida y la respuesta de los pacientes? ¡Aquí puedes encontrarlos!
“Todo empezó con unos dolores de tripa totalmente llevaderos y sin importancia, hasta que poco a poco fue aumentando su frecuencia y se dio con el diagnóstico del cáncer “gran olvidado”: cáncer de páncreas.“
La primera decepción fue saber que, debido al diagnóstico de esta enfermedad en fases tan avanzadas, la única opción era “cronificar o dormir” al tumor pero no hacerlo desaparecer. El siguiente paso, una vez conocida la enfermedad, fue incorporar a nuestra vida las numerosas visitas médicas y las sesiones de tratamiento en el día a día. Para ello, el apoyo y la confianza en nuestro médico fue fundamental, siempre buscando ese compromiso entre calidad de vida y control de la enfermedad.
Incluso en estos momentos tan duros, sacamos vivencias positivas que nos quedan para siempre . Así que adaptamos nuestra “nueva vida” con racionalidad, siendo siempre conscientes de la gravedad de la situación pero intentando disfrutar de las cosas como habíamos hecho antes: viajes, aficiones, momentos en familia, nuestro trabajo… Cuando parecía que ya nos habíamos “acostumbrado” y que teníamos la situación controlada, llegó la noticia tan temida: la enfermedad estaba evolucionando y se había dejado de responder al tratamiento.
“Cuando parecía que ya nos habíamos “acostumbrado” y que teníamos la situación controlada, llegó la noticia tan temida: la enfermedad estaba evolucionando y se había dejado de responder al tratamiento.”
Gracias, papá, por la lección de vida que nos has dado, por habernos enseñado a disfrutar de la vida mucho antes de que el cáncer llegara, por la pasión que siempre has tenido por tu trabajo, la ciencia (y que me has hecho sentir a mí por ella), por el cariño con tus amigos, solidaridad, generosidad, humanidad y sensibilidad. Por habernos querido tanto y habernos permitido quererte inmensamente, por recorrer los tres juntos medio mundo y por darnos la lección de vida más importante: incorporar la enfermedad y en particular el cáncer como parte de la vida. Como tu decías, los seres humanos somos un conjunto de reacciones químicas que forman una máquina, la cual un día deja de funcionar. ¡Gracias de parte de todos los que te conocimos por permitirnos vivir tus experiencias y enseñanzas, y gracias también por el legado científico y humano que nos has dejado! Como tu nos dijiste: una persona sigue viva mientras se le recuerde y nosotras, toda tu familia, colegas y amigos te recodamos permanentemente, así que… ¡sigues vivo con nosotros!
Desde donde estés que sepas que nuestro amor es más fuerte que la distancia y el tiempo que nos separa. Siempre estarás con nosotros. Te queremos y te querremos siempre.
Como nuestro familiar, cada año seguimos diciendo adiós a demasiados pacientes de cáncer de páncreas ya que éste es diagnosticado, normalmente, en una fase avanzada sin casi posibilidad de curación. Esto no es aceptable y no nos podemos quedar de brazos cruzados. Es urgente y necesario recordar a todas las personas que nos han dejado por esta enfermedad y apoyar a todas las que actualmente se están enfrentando a ella y, por supuesto, a las que todavía no han sido diagnosticadas (¡podemos ser cualquiera!). Por ello, hay que promover la visibilidad de esta enfermedad, dar a conocer este cáncer y apoyar incondicionalmente su investigación, ¡¡tanto en la búsqueda de nuevos agentes de diagnóstico más precoces como en nuevas terapias!!
“Por ello, hay que promover la visibilidad de esta enfermedad, dar a conocer este cáncer y apoyar incondicionalmente su investigación, ¡¡tanto en la búsqueda de nuevos agentes de diagnóstico más precoces como en nuevas terapias!!”
Nuestra campaña sigue en marcha y seguimos necesitando tu apoyo. Cada granito de arena suma en la montaña… #JuntosSomosMásFuertes
Recuerda que puedes donar aquí desde 5 euros, algo más de lo que cuestan dos cafés 🙂
¡¡Ayúdanos a encontrar tratamientos más efectivos contra esta enfermedad!!